La actividad impulsada por el área de Cultura del Gobierno de Junín, en conjunto con instituciones como “Arquitectura Rioplatense”, “Casa Río” y “Humedales Sin Frontera”, se realizó en el barrio Los Totoreros con el propósito de capacitar a los vecinos de dicho lugar sobre el uso de la totora para fabricar objetos y generar ingresos adicionales.

Además se llevó a cabo un recorrido sobre los humedales de la Laguna “El Carpincho” con el propósito de estudiar en profundidad la fauna, flora y población del lugar.

Una de las claves del encuentro fue abordar el vínculo existente entre la noción de cultura y el ecosistema, y analizar la manera en que nos relacionamos con el entorno. También participó de la jornada Carlos Gorard, un artesano en fibras vegetales y productor mimbrero que brindó su experiencia a los vecinos sobre su propia experiencia de construcción con totoras.

A propósito de esta segunda jornada, Agustina Barbosa, directora de Cultura del Municipio, contó: “Esta fue la segunda acción que se llevó a cabo a partir de un intercambio que tuvimos con “Casa Río” y con “Arquitectura Rioplatense”, con los cuales realizamos una caminata al humedal para entender cuál es la relación que los seres humanos tenemos con el ecosistema, en este caso en Junín, cuál es la relación que tenemos con los humedales, cuál es la situación de los mismos, qué comunidad vive en estas tierras, cuál es la cultura de ellos”.

 “El pensamiento puede llegar a ser muy diverso también,  cuidan el río cuando sube, se sienten como cuidadores de ese espacio, tienen una relación con la naturaleza mucho más fluida que las personas que vivimos en la ciudad, un poco ajena a lo que hacen”, dijo la funcionaria. Además, la directora añadió: “Mas allá de eso, lo importante es cómo nos relacionamos con el ecosistema que nos rodea, si hacemos un uso, un abuso o si tenemos una relación de respeto con el mismo, en este caso, con los humedales y la naturaleza”.

 Por otro lado, sostuvo  que “ este taller se realizó con la comunidad del barrio Los Totoreros es una comunidad donde se colecta la totora y hacen uso de ella, viven con eso en el día a día y necesitaban una capacitación para aprender qué más pueden hacer ellos como personas que trabajan con dicho material, y qué más podemos hacer nosotros como Gobierno, como Estado para ayudarlos en que su calidad de vida sea cada vez mejor”.

“Se pensó en esta capacitación para que ellos puedan construir algo con eso que juntan y además pensar en un futuro, una posible venta de estos objetos, no solamente el trabajo de juntar la totora sino también el poder vender lo que arman con eso”, agregó.

Por otra parte, destacó la  tarea del artesano a cargo de la capacitación, Carlos Gorard y dijo: “Él hace trabajos artesanales con el junco, con la totora y lo que hizo fue capacitar a los vecinos del barrio, que ya recogen esas totoras en la laguna “El Carpincho”, y desde ahí valorar el trabajo de ellos y valorar lo que el ecosistema les brinda al barrio Los Totoreros para poder hacer sus objetos”.

“Se trata de poner en valor lo que la naturaleza nos brinda para poder hacer uso, y no abuso, sino con respeto, y de eso que la naturaleza nos brinda valorizar el trabajo artesanal de los vecinos del barrio Los Totoreros para que puedan producir un objeto y tener una fuente más de ingreso laboral”, declaró para finalizar Barbosa.